No tengo ganas de culparme por ello. Si es mi culpa bienvenida que sea, porque estoy cansado de comportarme bien y sufrir por mis malas acciones a lo largo de mi vida cuando probablemente mi persona no habrá provocado ni la mitad de dolor que me han provocado a mi.
No voy a pedir perdón esta vez por ello. Porque seria de valientes y yo soy un cobarde. Si no lo controlo, bienvenida sea la ostia que nos demos. Porque se que no voy solo en este barco y aunque yo acabare malherido, habrá mas gente que se caiga conmigo. Ellos no eligieron este destino, o puede que si, siempre tuve algo escondido que me hacia peligroso. Por eso siempre huyo antes de que se den cuenta de ello.
No tengo miedo a ello. Bienvenido sea el miedo de nuevo. En realidad me gusta, puede que sea de los mejores amigos que he tenido nunca. Siempore ha estado ahi, arropandome por las noches, haciendome cosquillas en la barriga y expulsando toda su maldad y energía cuando lo ha requerido para defenderme del entorno.
Nunca dije que fuese justo para ninguno de los tres. Para mi, para ti y para nuestro viejo amigo, el miedo. El sabe como controlarnos. Tambien sabe como juntarnos en el futuro. Confio en el.
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